El Ateneo de Almagro ha incorporado dentro de su extensa programación a la Danza, un nuevo espacio que tendrá lugar en la Sección de Música y Danza, y que cambia de nombre para tal efecto. El invitado de excepción que puso en marcha esta fantástica iniciativa fue Francisco Carbajal, gran Bailarín y Profesor de Danza Clásica en el Conservatorio Profesional “José Antonio Ruiz” de Albacete, formado en el Joffrey Ballet de Chicago bajo la dirección de Luis Fuente. Agradecido por las palabras de presentación de Alfonso Candelas, coordinador de la Sección de Música y Danza, Francisco Carbajal comenzó su conferencia haciendo un acercamiento general de la Danza y sus elementos al público interesado. Después de una pequeña reseña histórica sobre la Danza, continuó tratando los elementos que la forman como son el instrumento principal, el cuerpo humano, la distribución en el espacio escénico, el movimiento corporal en base a unos códigos o técnicas, o la utilización de miradas, gestos o posiciones como elementos de expresión y comunicación. La magnífica intervención estuvo ilustrada por videos y fotografías que complementaban la exposición de carácter pedagógico y que el público agradeció especialmente. Continuó su discurso hablando sobre las aportaciones de la danza en la mejora de la coordinación corporal, condición física, ya que existe un trabajo muscular y de resistencia. Desarrolla la disciplina, mejora la autoestima y favorece la interacción entre los individuos.
“Si pudiese decir lo que quiero decir, no habría razón para bailarlo”. Con esta frase de la gran bailarina Isadora Duncan, Francisco Carbajal reiteró la importancia de la Danza y el Arte en la sociedad como medios de expresión. Es por ello que a partir de la Danza Clásica, que ya aparece en los Ss. XV y XVI en Italia y Francia y que buscan la verticalidad e importancia del equilibrio, aparecen en el S. XIX nuevos géneros de expresión como son la Danza Moderna, que rompe con los ideales estéticos de la clásica, la Danza Contemporánea en el S. XX cuya finalidad es la búsqueda de la innovación, improvisación y libertad de movimientos basados en la búsqueda de ideas abstractas. Sin olvidarnos de las Danzas Urbanas que aparecen en la segunda mitad del S. XX o las tradicionales y autóctonas como el Flamenco, declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
Para concluir, el invitado abordó la relación tan estrecha de la música con la danza y su aplicación como estímulo coreográfico y como acompañamiento. De manera muy inteligente hizo ver al público que la Danza está muy presente en la sociedad a través del deporte como es la gimnasia rítmica, patinaje artístico o la natación sincronizada, así como las artes marciales. Por último, y como colofón a una velada que no dejó indiferente a nadie, habló del gran nivel del que goza la Danza en nuestro país y que es reconocido en todo el mundo gracias al esfuerzo de bailarines y coreógrafos como son Nacho Duato, José Antonio Ruiz, Eva Yerbabuena, Antonio Najarro o Tamara Rojo entre otros.