El Ateneo de Almagro (www.ateneodealmagro.org) ha organizado a través de su Sección de Cine (coordinada por Santiago Sánchez) un acto de presentación del libro “Tiempos de cine”, del autor Fernando Donaire.
El autor acompañado de la gestora cultural Almudena Cañete se ha desplazado desde Madrid a Almagro para presentar esta reciente publicación que, sin duda, completa una gran trayectoria del periodista, escritor y profesor Fernando Donaire. El invitado de la institución cultural almagreña pudo compartir, a través de un ameno y completo coloquio con Almudena Cañete, su experiencia personal y profesional en la gestación y edición de la obra presentada en el Ateneo de Almagro.
Tras el visionado inicial y final de fotogramas correspondientes a una buena parte de las películas contemporáneas incorporadas y analizadas en el libro se abrió un intenso coloquio en el que, además de comentar los pormenores desde que concibió la idea de escribir la obra, permitió que el público asistente al acto conociera de viva voz la estructura y metodología empleada en sus casi trescientas páginas. Al respecto, Donaire compartió su horizonte vital y mirada personal sobre las películas presentadas y, a la par, se detuvo en infinidad de detalles que, según el autor, nunca deberían dejarse pasar.
El libro “Tiempos de cine” se presenta en una edición excelentemente preparada y de gran belleza. Y el autor nos adentra en las cerca de setenta películas seleccionadas en un original y enriquecedor ejercicio de contraste de tiempos que gira alrededor de las distintas vicisitudes que podríamos experimentar cualquiera de nosotros en la vida misma, ya sea como entusiasta lector del género cinematográfico o, bien, como inquieto y curioso espectador amante del cine. En todo caso, el camino propuesto es un ejercicio de acompañamiento didáctico que nutre nuestro conocimiento cultural y experiencia personal mediante una introducción a la película, un itinerario pedagógico y una propuesta sobre las razones para ver cada una de las películas seleccionadas. Todo ello, sin olvidar que en última instancia asistimos a una experiencia reveladora sobre los distintos tiempos del ser humano en el ejercicio de sentir y experimentar los distintos estados de la vida misma.