El Ateneo de Almagro se desplazó hasta Puertollano para conocer la exposición «Los fotógrafos de El País»
Un grupo de socios del Ateneo de Almagro disfrutó el pasado sábado de una excursión cultural muy especial, desplazándose a la ciudad de Puertollano para conocer en profundidad la exposición «Los fotógrafos de El País» que actualmente se muestra en el museo Cristina García Rodero. Y fue el coordinador de la sección de Fotografía, el fotógrafo Manuel Ruiz Toribio, quien guió a los ateneístas a lo largo de las tres plantas del museo.
Ruiz Toribio enseñó las casi doscientas fotografías de 20 fotógrafos del diario El País (19 varones y una mujer) que conforman la propuesta, haciendo un repaso a más de 40 años de noticias acontecidas dentro y fuera de nuestras fronteras. Los visitantes pudieron comprobar cómo el «diario de la democracia», como muchos lo denominaban, decidió desde el principio darle un sitio y notoriedad a la fotografía de calidad, con criterio e imaginación, ausente en la prensa española desde el golpe de estado de los militares fascistas.
Las tres plantas del museo Cristina García Rodero acogen imágenes impactantes, a veces tiernas y a veces duras, en esta especie de álbum familiar en el que no solo se muestran los hechos más agradables. Fotógrafos veteranos, como César Lucas o Marisa Flórez, presentan imágenes icónicas de gente con ganas de libertad; o por ejemplo otro veterano, Bernardo Pérez, salta fronteras para retratar a gente humilde en lugares my necesitados de justicia social. «La tradición fotopeiodista cuidada y sostenida», según palabras de la exdirectora de El País, Soledad Gallego (la única mujer al frente del periódico entre otros cinco directores), dio paso a generaciones de fotógrafos jóvenes que aportaron nuevas ideas estéticas a la fotografía de prensa.
Aunque la presencia de nuestro territorio es casi nula, los grandes personajes manchegos como Pedro Almodovar o Antonio López, se suman como iconos imprescindibles de la cultura española. La contundencia de una mujer cruzando la Gran Vía madrileña en pleno confinamiento durante la primavera de este año, construida con una luz maravillosa y tomada por Samuel Sánchez, generó un especial interés consiguiendo emocionar al grupo almagreño, invitándolos a pensar seriamente en las causas de la reciente pandemia.
El museo Cristina García Rodero sigue así intentando despegar lentamente después de dos años de vida: «Esperamos que en poco tiempo este espacio cultural pueda contar con actividades relacionadas con la fotografía, talleres didácticos, biblioteca, fondos propios, conservadores y tantas otras cosas que le puedan dar una vida propia», confió Manuel Ruiz Toribio en el cierre de la visita guiada a sus compañeros ateneístas.
