Ángel Luis Moraga, docente, humanista y colaborador del Ateneo de Almagro, ha presentado su nuevo libro La casita de papel en una ruta literaria por el pueblo que ha inspirado su novela.
La actividad ha comenzado en el punto de encuentro, a las puertas del Ateneo de Almagro. José Antonio Prieto (presidente) ha dado la bienvenida y posteriormente Ángel Luis Moraga ha introducido la actividad con una fotografía de unos soldados captada durante la guerra civil española, “porque ese fue el germen del libro, las historias que mi abuelo me contaba sobre la guerra. Fueron casi veinte años de investigación y escuchando historias por parte de personas que ya no viven. La casita de papel es un libro basado en hechos reales que he novelado y que se desarrolla en un pueblo como Almagro, aunque en sus páginas nunca se menciona este nombre”, explicaba el autor.
Han sido diversos los lugares de la localidad que se han visitado en un recorrido en el que los asistentes -alrededor de treinta- han podido disfrutar de un paseo acompañado por las prolijas explicaciones del profesor de Historia del Arte D. Enrique Herrera. La ruta ha transcurrido por las calles de Almagro y se ha detenido en lugares como la antigua casa del médico don José Almodóvar, el Teatro Municipal, la calle Jeme, la iglesia de Madre de Dios, el Arco de Granada o la panadería de Vicente-Vicente. En cada parada el autor leía un fragmento del libro que hacía referencia o citaba textualmente el lugar para, posteriormente, cederle la palabra a Herrera, quien diseccionaba los detalles artísticos e históricos correspondientes.
Durante la ruta el autor ha ido mostrando fotografías antiguas relacionadas con los escenarios visitados en las que se inspiró para escribir la novela, “un libro con alma y de memoria histórica que mi editor comparó, salvando las distancias, con Cien años de soledad, puesto que en sus páginas se narran dos siglos de la historia de España y abarca cuatro generaciones de una familia”. Un libro en el que se recogen multitud de anécdotas familiares que podrían ser las de cualquier familia y de un pueblo como Almagro que podría ser cualquier pueblo de La Mancha. “Puede que exista cierta influencia de García Márquez, puesto que he dado cuenta de toda su obra y Almagro podría ser el Macondo de La casita de papel”, señaló Moraga.
El recorrido ha finalizado en la plaza Mayor, “un espacio anacrónico y generacional que se menciona de manera continuada a lo largo de la novela”. La hora y media aproximada de duración planificada se ha prolongado una hora más. Pero los asistentes han disfrutado de esta mezcla de literatura e historia en un agradable paseo por las calles de Almagro en el que se ha puesto en valor su patrimonio.